Bueno, ¡tocó decir adiós! Ya llevaba unos días que se te notaba... ¡que la policía no es tonta!
Realmente no sé cómo me has aguantado... bueno sí... supongo que en fondo te iba la marcha... ¿no? ¡Si hasta tu nombre lo decía! No te preocupes, ya mañana no te despertaré sobresaltado, te dejaré dormir.... como yo siempre digo... cinco minutitos mas... ¿no? Venga, yo te los concedo. Pero no más, que sé que te voy a echar de menos.
Espero que disfrutaras de la música exactamente como yo, o si cabe, aún más. Con tantas luces brillando a tu al rededor, pero tu deslumbrabas más. ¡No sé cómo lo hacías "joio"! Ahora tú eres una de ellas.
¿Sabes qué? Me encantaba quedarme mirándote, flotando tan tranquilo, durmiendo mientras yo me moría de sueño, o enfadándote. Supongo que hasta en eso nos parecíamos, de caracter fuerte :) No sería la primera vez que me inspiraste.
No te podrás quejar, ¿eh? mira qué de cosas has aprendido... menos mal que siempre estabas ahí (no tenias otro remedio ¬¬) para repasar el temario conmigo.
Pero sobre todo, gracias por "despedirte". Quizás todo eso de los sueños es verdad y es ahí donde nos dijimos "adiós"... ¡que grande era... y qué libre te sentías, ¿verdad?!
Deep inside... ;)
¡Nos vemos colega!
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